Nazanin Armanian

Publico.es

Nangarhar, milenaria urbe budista, Afganistán. Una joven se cubre el rostro con las manos. Está colocada encima de un podio. Las decenas de hombres que la rodean y tocan, gritan. No van a colgarle una medalla de campeona, tampoco van a lapidarla por no llevar burka: están pujando por ella, le han arrancado el velo para evaluar el precio de la mercancía subastada “al desnudo”. El vendedor, su marido, pone un precio inicial de 6.500 rupias, unos 50 euros. Si tuviera 9 o 10 años, podría recibir por ella hasta 3.000 euros en el mercado de objetos de primera mano.

Bibi Zivar, La Dama del Ornamento en la lengua dari, una joven envejecida, empobrecida y maltratada cuenta cómo funciona esta forma de trata de mujeres: con tres hijos fue repudiada por su esposo y forzada a casarse con su cuñado, quien la vendió junto con dos hijas (él se quedó con el hijo varón) por unos 1.000 euros a un pakistaní cuando ella cumplió 40 años. Después de 17 años de matrimonio, el marido se ha cansado de Bibi. ¿Y ella se cansó de él?

El estigma de haber sido vendidas o entregadas en trueque por una vaca, una moto o algo de opio, impide que ellas regresen a la casa paternal, y si otro hombre no puja por nuestra Bibi no tendrá donde caerse muerta, literalmente.

Cientos de afganas se suicidan, quemándose a lo……en Arabia Saudita y otros países sunnitas,  parecido a al-mut’a……

Continua en:

http://blogs.publico.es/puntoyseguido/2064/empieza-la-subasta-de-mujeres-hagan-apuestas/